MELBOURNE: DÍAS 11-16 (Jueves 3 - Martes 8 Feb.)
MELBOURNE
Día 11: Jueves 3 de Febrero
Me han engañado como a un chino, y ha sido un chino joder. Mira que le pregunté 3 veces al de la tienda de tabaco del aeropuerto si podía llevarme un cartón y aparte un paquete de 250 gr de liar. Pues nada me mintió, y encima por pecar de bueno, en el papel que hay que rellenar al entrar a Australia he puesto que no estaba seguro de sí incumplía esta norma. Si no puedo me dejarán solo un cartón, y no me arriesgo a que me multen, pensé. Pues no, hay que ser perro para todo, si hubiese puesto que todo estaba bien me habrían dejado pasar sin problemas, como a mucha gente delante mío, pero en cuanto lo leyeron me abrieron la mochila, me quitaron todo el tabaco y me dijeron que si quería llevármelo tenía que pagar 200 dólares. Me va a salir después más caro, pero que os den por el culo, me cago en la autoridad, encima la tía me decía sonriendo que era demasiado tarde, yo le decía, “look”, cogía un cartón y hacia como que lo tiraba al cubo de al lado, pero nada…
Bien empezamos, pero bueno, me ha costado menos de 30 euros todo en Kuala Lumpur, solo que aquí vale más que el oro. Mi hostal nos recoge en bus en el aeropuerto, conocí a 4 chavales de Canadá esperándolo, iban al mismo hostal que yo y acababan de llegar a Australia. Me costaba bastante entenderles pero bien, eran majos. Al llegar al hostal resulta que nos metieron en la misma habitación. Hoy era el cumple de uno y ya estaban con toda la fuerza, me invitaron a ir con ellos a por bebidas pero les dije que luego iría, quería estar tranquilo, ir a la ciudad a por un adaptador para cargar el pc, a por una tarjeta de móvil y a ver un poquillo como pintaba Melbourne. Mi hostal está bastante lejos del centro, pero se pueden pillar tranvías cada 15 minutos, se tardan unos 20 minutos en llegar. De todos modos el hostal es la polla, todo muy limpio, áreas comunes gigantes, terraza con barbacoa… y al lado de la playa. Está a reventar de gente, pero algo me dice que aquí tampoco voy a encontrar españoles.
Bueno volví a mi hostal, que no había dicho, está en San Kilda, un pueblo-barrio a las afueras. Y es que había tanta tanta gente por ahí que me agobié, no sabía con quien hablar, ni nada, había barbacoa gratis en la terraza y es que ni salí, me pegó una rayada mental muy seria y opté por automarginarme. Pasé las siguientes dos horas en el ordenador o leyendo la guía de Australia como si me interesara pero solo quería hablar con alguien y salir de ese estado deprimente. Salí a echar un piti y ya me puse a hablar con un chico que estaba solo, era francés y majillo pero cuando se acabó el piti me dijo que se iba a internet, joderrr. Así que nada, vi a la gente de mi cuarto en la terraza hablando con todo el mundo como si nada pero claro es que hablan inglés de puta madre, y yo para 4 frases que he hablado con ellos antes me he sentido deficiente mental, y he sentido que ellos también lo sentían.
Total que rayadas de estas me dan a menudo, y más en estas situaciones, pero al final me armé de valor y salí a la terraza, me encendí un pìti con ellos y como saludo les dediqué una sonrisa por si acaso me ponía a tartamudear en inglés como un gilipollas. Poco a poco me fui relajando y empecé a hablar, solo me ponía nervioso cuando no entendía a los canadienses, les decía que me repitieran y sin darme cuenta les decía Yeah, en vez de que me repitieran otra vez, pero tampoco hice ninguna cagada gorda porque me habría dado cuenta. También hay unos suizos en mi cuarto que están aquí con nosotros, a estos les entiendo de puta madre, así que tiré más con ellos. Fui a la tienda de licores a por 4 cervezas y según iba bebiendo mi inglés iba mejorando, a las 2 ya no se puede beber en el hostal así que nos fuimos a otro hostal que hay cerca y debajo del mismo tienen una discoteca. No me dejaron ponerme a la cola con la litrona así que uno de los suizos se quedó conmigo afuera y estuvimos más de media hora ahí charlando, más majo que la ostia, es todo grande y se llama Rubi, es su apodo, de su nombre no me acuerdo.
Cuando entramos no encontramos a los demás pero estuvimos por ahí los dos a gusto, hablando con alguna y bebiendo. Él me decía que los españoles tenemos suerte, que todas las tías piensan que somos unos lovermens, y que antes en el hostal unas le habían preguntado de donde era yo, y cuando les dijo que España se pusieron como locas, que coten joder, lo primero que hacía era decirle a todas que era de Spain a ver, pero bah, poca ostia… Ya le expliqué que yo cuando salía no era un rompecorazones sino más bien un borracho, pero me mola la idea de tener esa ventaja en el pasaporte, tengo que cambiar un poco el chip y a la garchavida.
Al final no encontramos a los demás y para las 4 nos comimos una hamburguesa y volvimos al hostal.
DÍA 12: Viernes 4 de Febrero
A partir de este momento, ya casi de noche, inundaciones! Alucina, en Melbourne el tiempo está loquísimo, ya lo había leído por ahí, la gente de aquí siempre mira el pronóstico aunque vaya a salir dos horas de casa porque es una locura, creo que se debe a corrientes que llegan directamente del polo sur. Un día cualquiera amanece soleado a 40 grados, a las dos horas cae el chaparrón del siglo, luego vuelve el sol, todo despejado… así siempre, aquí es lo normal, pero por lo que me contó uno en verano no suele llover tanto nunca. Bueno pues la que empezó a caer fue de película, yo me refugié en la parada del tranvía y cuando lo cogí la cosa empezó mucho más exagerada, cada vez que alguien se bajaba las pasaba putas, y yo creo que llegué a mi hostal en el peor momento. La de al lado me deseó suerte y en cosa de 20 metros era como si me hubiesen tirado al rio. En la puerta del hostel había peña grabando en video a los que llegábamos descojonándose, me hicieron una mini entrevista mientras me quitaba las zapas y escurría la camiseta, que puta sobrada joder.
La cosa no paró siguió igual o peor por horas, y cortaron los tranvías a la ciudad, había muchos trozos de la carretera inundados, y en la terraza no se podía estar más que en un trozo con toldo pero que estaba a reventar así que nada más que me pillé una cerve, que son caras, estuve un ratillo con los suizos y unas chicas de escocia y me fui pronto a dormir, que hoy me he despertado a las 2 y no puede ser.
DÍA 13: Sábado 5 de Febrero
Hoy los suizos sí que querían ir al Aquarium así que desayunamos un poco de Free Food, que en otras palabras es robar tragos de zumo y galletas de la cocina. No os dije que los suizos son 2, Rubi, con el que me pille el pedo el primer día, y Sandro (así lo llamo yo, debe de ser swanugdrour o algo así), uno de 25 y otro de 21.
Después fuimos al mercado de Victoria Market, pero estaban cerrando todo así que volvimos al hostal. Veis lo que digo, la peña no se interesa mucho por las ciudades, vienen a los sitios y prefieren estar echando cervezas en la terraza del hostal, que no está mal pero joder, hay que aprovechar un poco más. Me estuvieron contando que alquilaron un coche hace unos días y fueron a la Great Ocean Road, una carretera que va por el mar, y hay un montón de playas muy guapas, una reserva de koalas, un parque natural, los 12 apóstoles, que son patrimonio de la humanidad… vaya que hay que ir, debe ser muy bonito. Lo del coche lo veo complicado así que ya veré.
Solo había reservado en este hostal para 3 noches, y ya mañana me toca hacer el Check out, intenté alargar la estancia dos dias pero estaba lleno así que a buscar otro, miré y encontré uno baratillo en el centro así que reservé para dos noches. Mañana quiero ver alguna cosa más de Melbourne y pasado hacer una excursión a la GOR. Me he puesto en contacto con un español que vino a Australia hace dos meses. Se llama Fran, es de Barcelona, y se vino aquí en Diciembre para hacer algo parecido a mí durante 3 meses, su idea era hacer la costa Este pero claro, las inundaciones y el ciclón lo han mandado al garete de momento así que ha estado viendo el entro y algo del Oeste. Hemos quedado en que era buena idea hacer alguna ruta por Tasmania juntos, así que nos pusimos de acuerdo, pillamos los aviones y para el martes nos encontraríamos en el aeropuerto de Melbourne para ir a Hobart (Tasmania) y organizar algún ruteo decente que debe ser una pasada. Pillamos juntos el hostal y ya quedamos en llamarnos el martes.
No quería juntarme a ningún español para no ponerme barreras con el inglés pero me parece una buena idea, vamos a estar unos días juntos y además ya estoy a punto de volverme loco de estar todo el puto día hablando en inglés. Luego él se va a Gold Coast y yo me iré a Sidney, estaremos una semana juntos.
Todos los de mi habita iban a salir, pero yo pasaba, mañana tengo que hacer el check out antes de las 10 de la mañana y además quiero aprovechar a hacer cosas. Tampoco puedo llevar el ritmo de esta gente, cada vez tengo el presupuesto más ajustado y no puedo beberme el dinero de comida o tours, a partir de ahora hay que andarse con mucho ojo que esto es bastante caro.
Estuve con ellos en la terraza, al final nos quedamos los suizos y yo nada más y ya me empecé a tomar vasitos de vino blanco del malo, que es lo que beben todos aquí, llegaron dos chicas de Holanda que acababan de llegar del aeropuerto, mas majas que la ostia, llevaban tiempo en Australia, una 8 meses, le pregunté si había conocido a algún español y me dijo que no! Joder, que puede que a dos o tres cuando estuve de camarera en Cairns pero que poca ostia.
Uno de los suizos, Rubi, iba más ciego que el copón y estaba empezando a perder el juicio, gracias a sus comentarios las holandesas decidieron irse a la cama, se le estaba yendo de las manos. A las 2 de la mañana a poco se lía, está prohibido beber a partir de las 2 en la terraza y si no lo guardas antes viene el de recepción y te lo quita, al día siguiente lo recoges en recepción. Bueno pues el tío vino y cogió la garrafa de vino y claro, Rubi y su ciego… Se levantó y se puso a decirle que era el Fucking, fucker, etc, etc. que nos estaba fuckeando la party. Bueno pues el del hostal que era 4x4 a poco se lo carga, y encima cuando le preguntó el nombre y la habitación Rubi le dijo que se llamaba “Ladron de bebida”, al final como le iban a echar a la puta calle le dijo quién era y agachó un poco la cabeza, buaaaaa estaba perdiendo el puto juicio. Yo me moría de vergüenza y me fui a dormir, jodidos guiris, se ponen más ciegos que la ostia.
DÍA 14: Domingo 6 de Febrero
Me levanté un poquillo tarde, al final hice el check out a las 11 pero no me dijeron nada, me despedí de los canadienses, a ver si me los encuentro en otro sitio, puede ser, los suizos seguían sobando, buuuuuu Rubi va a tener problemas hoy. En el tranvía que me llevaba al centro vino también el francés que conocí el primer día y na le estuvimos dando al palique y ya me bajé en el centro. El hostal donde voy parece que está bien, dan pasta y arroz gratis todo el día pero cuando me voy catando de todo… joder, cobran 4 dolares por hora de wifi, no hay taquillas en la habita, hay que dejar las cosas en un sitio por monedas, los baños apestan, me duché con un tampón usado en el suelo… y luego en la habitación un pedazo de mierda no me saludó cuando le dije hola.
Pillé la mochila pequeña y me fui a dar una vuelta, llegué a un sitio que ayudaban a jovenes a organizar sus estancias, buscar alojamiento, tours… Entré y una chica muy simpática me dijo que me sentara en un puf, me senté y se sentó ella al lado mío con una carpeta. Me preguntó mil cosas, ya le dije que quería estar dos meses por aquí, viajar, tal… pero vaya, que solo quería ir a la GOR y me enseñó varias opciones, al final pillé un tour en un minibús que recogía gente de mi hostal también en la puerta, y era caro, pero bueno, es de visita obligatoria, debe ser muy bonito. Salimos a las 7,30 de la mañana y volvemos a las 9 de la noche.
De ahí fui al Victoria Market, es un mercadillo donde puedes encontrar de todo, desde artículos de lujo hasta unos zapatos gastados. Mola, es el marcado más antiguo de Melbourne, tiene más de 100 años y los vendedores andan por ahí ofreciéndote de todo, no están detrás del mostrador como en una tienda normal. Estuve a punto de pillarme un sombrero de cuero muy muy coten pero no me decidía y acababa de gastarme una pasta en el tour así que esperaré, pero necesito un gorro o gorra ya, aquí preta mucho el sol. Un sabio arnedano me dio la idea de grabarme unas chapas militares con mis datos, mi grupo sanguíneo y algún teléfono de emergencia por si me pasaba algo y me encontraban por ahí hecho mierda así que me hice unas, con mi nombre nacionalidad, grupo sanguíneo, teléfono del seguro del viaje… Estuve por ahí viendo todo y me volví al centro, quería ir a comer a un sitio que recomendaba la lonely planet, Movida, cerca de la catedral que ví el primer día. Joder, resulta que llego y es un restaurante español, me pongo a leer la carta, garbanzos, chorizo, tortilla de patata… y todo caro así que me piré. Al final comí sushi, que coten, ya he aprendido a usar las salsas, de la negra puedes abusar pero la verde ojito, sabe a rayos pero untando un poquito solo mola. Todavía no me apaño con los palillos, le chica de la barra estuvo un rato enseñándome pero no me quedé bien con la copla y cuando no miraba me metía los trozos casi enteros a la boca para que no se me cayeran.
Pasé el resto del día en el casino, es uno de los casinos más grandes de Australia, una pasada, la sala de poker es la polla, 3 torneos todos los días para todos los bolsillos, cerca de 60 mesas de cash en constante movimiento, y muy informal, mola, había peña en pantaloneta, no te pedían identificación y pude entrar con la mochila.
DÍA 15: Lunes 7 de Febrero
Casi me duermo, me duché a toda ostia y bajé al punto de encuentro, muy justito, a las 7,25. Me tomé un café del seven eleven y al bus.
Paramos en un par de acantilados más y luego paramos a comer en un sitio donde podíamos buscar Koalas en los árboles. Me hice dos sandwiches que sacó la chica para todos y fui con unas chicas inglesas a buscarlos. Una había nacido en Argentina aunque vivía desde los 7 en Inglaterra y algo sabía de español, que bien, hacía más de una semana que no decía nada en español, solo para jurar contra algo cuando iba por ahí andando solo.
Encontré 3 koalas, uno de ellos se despertó y se puso a comer, que coten joder, aunque he aprendido un poco de los koalas y he descubierto que son deficientes mentales, son tan vagos que su cerebro se ha ido reduciendo cubriéndose de un líquido para pesar menos y requerir menos energía, duermen más de 20 horas al día y el resto del tiempo solo comen, no se bajan de los árboles nunca para que no se los garchen, son demasiado torpes.
De aquí ya llegamos por fin a los 12 Apóstoles, había gente que subía en helicóptero para verlos, pero yo hice una ruta andando durante una hora más o menos, es increíble, se trata de unas formaciones rocosas que salen del agua cerca de la costa, se ven desde unos acantilados aunque ya no son 12, ahora son 11, uno desapareció hace unos años tras un derrumbamiento. Es una pasada de sitio, me encantó.
De aquí volvimos a parar en dos sitios más, una playa rodeada de acantilados muy bonita también, tenía su historia pero no me enteré porque ya andaba durmiéndome en el bus y después vimos otra formación rocosa como con forma de puerta en medio del mar y alguna cueva en la playa. Pasé el camino de vuelta a Melbourne durmiendo.
Cené un kebab, o así lo llaman, pero es como un bocadillo, no se parece a los de España ni ningún lado. Mañana tengo que estar en el aeropuerto a las 12 y recoger todo antes así que me fui pronto a dormir.
DÍA 16: Martes 8 de Febrero
Me desperté y recogí todo, metí la reserva del avión en un pentdrive, le regalé la tarjeta de internet a un alemán que había al lado mío y fui a recepción a ver si me lo podían imprimir pero que va… me dijeron dónde ir así que me puse en marcha, era un cibercafé, y resulta que no te imprimen sin más, tienes que pillar una tarjeta de internet, meterte al ordenador, imprimirlo y luego pagar la impresión. Soy gilipollas, son las mismas tarjetas que le acabo de regalar al alemán, me dieron ganas de volver al hostal a pedírsela, pero a pagar, por imbécil, por imbécil.
Fui a la estación de buses y pillé un bus al aeropuerto, me costó mucho encontrar mi terminal y es que mi compañía, Tiger, está apartada, tiene una terminal aparte, bueno pues llego, miro la pantalla de vuelos y no salía el mío, que raro… me saco el billete de la mochila, lo miro y ostiaaaa en cuanto leo la fecha se me retuerce el estómago, 7 de Febrero, el cumple de mi hermana, y la llamé ayer para felicitarla, noooooooooo, el desfase horario va para adelante, no para atrás, hoy es día 8 pero bien además. Que cagada madre mía, me acerco a la chica del mostrador y le cuento lo que me ha pasado, bueno pues no puedo tener más suerte, resulta que “mi vuelo” de ayer se canceló y ahora me devuelven todo el dinero, yujuu, así que me pongo en busca de otro avión, me conecto a internet y reservo para ir con otra compañía a las 8 de la tarde, que coten, solo pago 10 pavos más. Pasé unas horas por el aeropuerto de café en café hasta que me llamó Fran, el catalán con el que me voy a Tasmania y nos encontramos en su terminal. Que coten joder, menos mal, nos pusimos a hablar tanto rato en español que me sentí hasta raro. Tiene 26 años y ya lleva casi dos meses aquí, está todo negro y nada estuvimos por ahí mientras me contaba sus historias, le acompañé a por su vuelo, salía una hora antes que yo, y me esperaría en el aeropuerto de Hobart. Un rato más tarde yo también estaba en el avión, camino de Tasmania.
Un abrazo!
13 de junio de 2016, 8:13
genial post, al final te quedaste a vivir o te regresastes,